Vida en otras vidas
Hoy vino a visitarme un amigo que se fue a vivir a Japón. Había mucho que contar. Trabajo, amistades y viajes. Todas cosas buenas.
Me da gusto por el. Fuimos muy cercanos durante un tiempo y me alegra saber que la decisión de irse le esté llevando a algo bueno.
Me emociona escuchar las historias de sus viajes y saber cómo es la vida por allá.
Platicamos de los amigos en común y de cómo les está yendo. Hemos vivido cosas diferentes desde que nuestros caminos se separaron.
Pienso en las cosas que han vivido y me gusta platicar con ellos de todo lo que han hecho.
Recuerdo entonces que yo pude haber ido también por alguno de esos caminos.
Vivo ahora, a través de sus relatos, las cosas que no puedo vivir.
Me proyecto en sus historias y me da gusto que las compartan conmigo.
Vivo otras vidas, aunque sea por un momento, y me inunda un sentimiento agridulce.
Quien sea que esté viviendo por mí, la debe estar pasando mal.