Despedida anunciada

“Y en silencio dirás una plegaria…”

Mi abuelo murió una noche de abril de 2006. Ese día nos despedimos por la mañana, aunque en realidad ya nos habíamos despedido antes. Hacía más o menos un año que le diagnosticaran una enfermedad terminal. A partir de entonces supimos que apenas alcanzaría a vivir un año más.

Quien no crea en las coincidencias tendrá una opinión. Yo solo puedo pensar objetivamente que el hecho de que me recibieran en su casa por aquellos días fue una muy afortunada coincidencia para mí, y por siempre les estaré agradecido. Supimos que nos esperarían días difíciles y quienes lo acompañamos hasta el final de este camino lo hicimos con cariño y amor. Dadas estas condiciones podríamos encontrar fortuna en la posibilidad de prepararse para ese momento, y creo que mi abuelo la aprovechó lo mejor que pudo.

Tuvimos oportunidad de platicar sobre muchas cosas durante sus estancias en el hospital, de las que preservo un par de joyas de sabiduría. Creo que nos dijimos todo lo que nos teníamos que decir antes del final, por lo que ese día en particular no tuve necesidad de hablar con él. Otras personas más lo necesitarían.

Aquella mañana, estando una de mis tías con el, comentó que ese sería el día, que ya no tenía más fuerzas para continuar. No quise estar más con él, no porque no quisiese, sino para que alguien más pudiese despedirse de él.

Prefiero acompañarnos en ese episodio con algo de la música que le gustaba escuchar los sábados por la tarde, tras una semana de trabajo. Si bien, a veces eran episodios tristes embebidos en alcohol, pienso que estaba donde quería estar, aunque fuese en sus recuerdos.

No fue perfecto, ni probablemente una persona excepcional, pero lo bueno que nos dejó durante el tiempo que compartimos y lo que hizo por mí lo recordaré siempre.

“No me vayan a buscar a una tumba o a una cripta, ahí no estaré más. Si quieren de verdad encontrarme, escuchen mi música, lean mis libros, usen mis herramientas…”

Y por eso te encuentro siempre en estas canciones abuelo.


You may also like...

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.